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Stanislas Jourdan es periodista, organizador de movimientos sociales y bloguero, pero prefiere describirse a sí mismo como “mediactivista”. ¿A qué se dedica exactamente un “mediactivista”? A utilizar una combinación de herramientas digitales y periodismo ciudadano para fomentar el cambio social y, a su vez, a entrenar y compartir conocimientos sobre éstas con otros mediactivistas.

Stanislas se graduó de un master en empresariales en Francia y compaginó sus estudios con su labor de periodista en el blog Tête de Quenelle. Tras la graduación, continuó escribiendo en publicaciones como Owni y La Tribune.

En la actualidad, Stanislas se dedica a dos proyectos principales: Ouishare, una organización sin ánimo de lucro fundada en enero de 2012 con la misión de explorar, conectar y promover ideas y proyectos para beneficiar a la sociedad a través del intercambio, la colaboración y la apertura. OuiShare es una comunidad abierta y global de gente apasionada (emprendedores, diseñadores, makers, investigadores, funcionarios públicos, ciudadanos y muchos más) trabajando para acelerar la transición hacia una Economía Colaborativa. El segundo proyecto es la Iniciativa ciudadana europea por una renta básica universal, una propuesta para pedir a la Comisión Europea que incentive la cooperación entre los Estados Miembros (según el artículo 156 TFUE) con el objetivo de explorar la Renta Básica Incondicional (RBI) como herramienta para mejorar sus respectivos sistemas de seguridad social.

En sus propias palabras, Stanislas comenta: “Quiero contribuir para hacer de este mundo un lugar mejor para las generaciones venideras. Para lograrlo, creo que necesitamos cambiar el sistema monetario, implementar un sistema de renta básica, ampliar nuestras libertades en todos los sentidos y superar este sistema político para fomentar una economía descentralizada, basada en los valores humanos. Si queremos llegar hasta allí, tenemos que partir desde la situación actual. Estoy más interesado en practicar una política “evolucionaria” que sencillamente revolucionaria.”

Stanislas tiene su base de operaciones en París, pero no se lo piensa dos veces a la hora de echarse una mochila al hombro y deambular por el viejo continente. En el 2013 se ha desplazado a Bruselas, Londres, Bristol, Atenas y docenas de ciudades francesas.